RAYUELA

sábado, 17 de octubre de 2015
martes, 6 de octubre de 2015
Movilgrafia
BREVE INFORMACIÓN SOBRE LA MOVILGRAFIA
Hacer Fotos con móvil
Con la aparición de las cámaras digitales, la fotografía se hizo mucho más accesible para todo aquel interesado en capturar instantáneas sin tener conocimientos técnicos previos.
Un paso más allá en ese sentido fue la posibilidad de hacer fotos con un teléfono móvil este hecho supuso un mayor acercamiento de la fotografía a todos los públicos. el gran avance tecnológico de los smartphones, ha hecho posible que este tipo de dispositivos, que utilizamos principalmente para hacer llamadas o para enviar mensajes de texto, tengan muchos más usos que se han ido ampliando con el tiempo. Por ejemplo, el acceso a internet, el poder utilizar aplicaciones para todo tipo de utilidades o el hecho de grabar vídeos o capturar imágenes fijas, al igual que cualquier compacta que cualquier compacta que encontramos en el mercado actualmente.
Hacer Fotos con móvil
Con la aparición de las cámaras digitales, la fotografía se hizo mucho más accesible para todo aquel interesado en capturar instantáneas sin tener conocimientos técnicos previos.
Un paso más allá en ese sentido fue la posibilidad de hacer fotos con un teléfono móvil este hecho supuso un mayor acercamiento de la fotografía a todos los públicos. el gran avance tecnológico de los smartphones, ha hecho posible que este tipo de dispositivos, que utilizamos principalmente para hacer llamadas o para enviar mensajes de texto, tengan muchos más usos que se han ido ampliando con el tiempo. Por ejemplo, el acceso a internet, el poder utilizar aplicaciones para todo tipo de utilidades o el hecho de grabar vídeos o capturar imágenes fijas, al igual que cualquier compacta que cualquier compacta que encontramos en el mercado actualmente.
Características de la Movilgrafía
Hay que hablar de las cualidades de la movilgrafía para entender el porqué de su éxito. En primer lugar, está el hecho de que el móvil es un objeto que llevamos normamente con nosotros la mayor parte del tiempo y que nos facilita el hecho de sacar una fotografía en cualquier situación que se tercie. Es un aparato realmente muy ligero que permite al usuario tenerlo siempre a mano y no requiere de un gran equipamiento como el de las cámaras profesiones para darle uso.
En segundo lugar, hay que mencionar que las cámaras que poseen los móviles son realmente fáciles de usar, puesto que no cuestan con tantas funciones como el resto de las cámaras digitales o analógicas, y los resultados que se pueden lograr a pesar de ello son realmente muy interesantes. Eso sí, no hay que olvidar que existen ciertas limitaciones técnicas, que nos impedirán llegar a hacer un determinado tipo de fotografias, que de momento, solo es posible realizar con cámaras más profesionales. Un tercer aspecto a tener en cuenta es que el móvil cuenta con un gran número de aplicaciones, destinadas a la edición de las fotografías realizadas con dicho dispositivo con las cuales se consiguen unos efectos muy llamativos sin la necesidad de recurrir programas más complejos, como los que utilizamos en nuestro ordenador.
La cámara del móvil
Cada móvil posee su propia cámara base con la que podemos sacar nuestras propias instantáneas. Entre las prestaciones más esenciales que traen de serie la mayoría de las cámaras de los smartphones, encontramos la posibilidad de seleccionar las zonas de enfoque o la exposición, entre otras cuestiones muy básicas. También existen ciertas cámaras que ofrecen la posibilidad de realizar fotos directamente en HDR, al igual que una opción para hacer fotos en formato panorámico mostrar una cuadrícula, para que nos sea mucho más fácil encuadrar los elementos que tratamos de plamar en nuestras instantáneas.
La Movilgrafía también es edición
La movilgrafía no solo consiste en realizar fotos con nuestro teléfono móvil, se entiende también al proceso de las fotos que se han realizado con este mismo dispositivo, es decir, a la edición con una gran diversidad de aplicaciones, que existen exclusivamente para dicha funcón. El catálogo de dichas aplicaciones se incrementa cada vez más debido al gran auge que está teniendo la fotografía móvil y su gran difusión entre los usuarios de dichos dispositivos que ven múltiples posibilidades creativas en todo ello. Por eso no hay que olvidar que hacer uso de todos estos recursos se considera también movilgrafía, puesto que es una parte muy importante de este nuevo concepto fotografía.
La movilgrafía en el 2.0
El concepto de 2.0 no solo puede atribuirse a una aplicación meramente tecnológica, también puede entenderse como una actitud o como una forma de actuar. Por ello, es posible aplicarlo de igual modo en el campo de la fotografía móvil que en la red. La movilgrafía tiene la virtud de ser inmediata, y el usuario que ha hecho la foto es el autor de la instantánea, dos conceptos que son necesarios para entender el modo en el que se trabaja con el término 2.0. La inmediatez de la realización de la realización de la foto, junto con la posibilidad de editarla desde el propio móvil, ofrece la posibilidad de mostrarla al momento en cualquier medio 2.0, ya sean redes sociales, webs y blogs o gestores de contenidos.
Otros usos de la movilgrafia
La fotografía móvil se ha convertido en un elemento recurrente para los artistas. Con el tiempo y el incremento de la calidad de las cámaras de los dispositivos móviles, no es de extrañar que muchos creadores estén viendo en ellas un mundo de posibilidades para sus obras. En la era digital en la que vivimos se podrían entender las posibilidades creativas que ofrece la movilgrafía, como un medio más para lograr resultados artísticos muy amplios juntando la cámara del móvil con el gran catálogomexistente de aplicaciones fotográficas. Hay que reseñar también las posibilidades que ofrecen la manejabilidad y la inmediatez de una cámara como es la del móvil para realizar reportajes fotograficos documentales de fotoperiodismo. Muchos profesionales hacen uso de sus smartphones para retratar acontecimientos, puesto que sus prestaciones facilitan la tarea no solo a la hora de documentar sino también de hacer llegar rápidamente imágenes a cualquier medio. Como en la fotografia tradicional, las fotos realizadas con un móvil tambien pueden ser mostradas en una exposición fotográfica. La limitación de su tamaño de impresión aún sigue siendo una de las limitaciones de la movilgrafía, a pesar de ello su visualización el marco en una sala de exposiciones se hace cada vez más frecuente. Incluso se hacen cada vez más frecuentes los concursos fotográfificos que admiten que las imágenes hayan sido tomadas con cualquier tipo de dispositivo. No es tan extraño ver entre las imágenes que ganan dichos concursos algunas realizadas con la cámara de un móvil.
¿ Qué es 2.0 ?
El término 2.0, acuñado por Tim O´Reilly en el año 2005, se asocia a la red de internet a una nueva forma de entender la misma. Desde un estado inicial o estático, donde la información que se mostraba era fija, sin apenas actualizaciones, y donde no había ningún tipo de interacción, que podría denominarse como la web en su estado 1.0, hasta una nueva versión mejorada. En esta, se estableció que lo esencial fuera la colaboración entre los usuarios, donde estos pudieran generar sus propios contenidos, convirtiéndose así mismo en autores dentro un entramado mucho más participativo y dinámico que el anterior. A raíz de todo esto, surgieron novedosas herramientas que ayudaban a los usuarios de la red a comunicarse entre sí. Como por ejemplo, los blogs o gestores de contenidos, el concepto Wikipedia o el sistema de podcasting, además de las RSS o las redes sociales, que se han ido especializando por tipologías y temáticas. Cada una de estas aplicaciones o sistemas virtuales ofrecen la posibilidad de intercambiar contenidos u opiniones, al mismo tiempo que aporta aprendizajes colectivos y socialización.
Más que una evolución, la web 2.0 es entendida como una revolución en la forma de utilizar cada uno de sus elementos. El usuario tiene un papel mucho más importante que el que tenía antes, donde era un mero espectador pasivo que se limitaba a buscar información. La palabra clave que mejor define este concepto es compartir ya que se comparte todo tipo de información, ideas, vídeos o imágenes.
Esta información la he sacado de un curso intensivo de El Mundo
Breve historia de Madrid
BREVE HISTORIA DE MADRID
Madrid en la Prehistoria y en la Antigüedad.
Pocos datos se conocen de lo que vendría a ser Madrid, permítasenos el anacronismo, an-tes de la Edad Media. Durante la Prehistoria, según apuntan numerosos yacimientos, el te-rritorio de nuetra ciudad fue habitado por pe-queños núcleos de población en las terrazas del río Manzanares. En la Antigüedad, fueron los carpetanos y algunas tribus celtas los que en el centro de la Península Iberica se dispu-sieron antes de la entrada de los romanos. Con ellos, Madrid no tendría desarrollo urba-nístico importante, pues, salvo Complutum—Alcalá de Henares hoy en día-, la Comunidad de Madrid fue un territorio de paso en el cen-tro de Hispania, como demuestran algunas calzadas romanas que se conservan en la sie-rra madrileña.
El nacimiento de Madrid: Matrice y Magerit.
Al inicio del Medievo, el territorio de Madrid formaba parte , salvo el obispado de Alcalá, de la capital del reido visigodo, Toledo. De esta época debemos el primer nombre de Madrid: Matrice, etimología difusa que, según los expertos, hace referencia a un arroya de agua. No sería hasta la conquista de la Península por parte de los musulmanes hasta que la ciudad no surgirá como localización poblacional. Sera, Muhammad I, allá por la segunda mitad del si-glo IX, quien la convirtió en fortaleza defensiva de Toledo, debido a su privilegiada situación (en el centro de la Península y cerca de la capital manchega).De nuevo la etimología debe acudir en nuestra ayuda, pues el siguiente nombre de la ciudad, del que deriva el actual, fue Magerit, en árabe, la cuidad madre de las aguas, por los beneficios de los acuíferos que allí había. En la Reconquista cristiana (año 1083), Alfonso VI la incorporará a los reinos castellanos, y poco a poco la ciudad irá tomando unas características propias de cos-mopolitismo, al darse allí la convivencia de musulmanes, cristianos y judíos. Magerit irá pronto transformándose en el latino Matrit por influencia de las lenguas romances que cada vez ten-drían más peso en la zona. Entrada la Edad Media, en el año de 1309, Madrid ve celebrarse sus primeras Cortes, acogiendo al rey Fernando VI. Un siglo antes, 1202, la ciudad obtuvo su fuero de municipalidad, iniciando así su andadura para ser la capital del reino hispánico.
Madrid, capital de las Hispanias.
La urbe irá poco a poco despertando los gustos de los diferentes monarcas. Los Reyes Católicos entraron solemnemente en Madrid en 1447 tras haber derrotado a las tropas portuguesas. Igualmente Carlos V, ya en la primera mitad del siglo XVI, acudío a la ciudad de Madrid en es-tancias cortas, atraído principalmente por los bosques donde practicar la caza que tanto le apa-sionaba. La ciudad en estos primeros años de la Edad Moderna sería un núcleo urbanístico re-ducido, de apenas 3400 habitantes, con un alcázar y algunas iglesias menores. La actual zona de La Latina, Las Vistillas, Puerta Cerrada …, son vestigios de ese Madrid que empieza a despuntar.
Felipe II y los Austrias.
Por fin llegamos al año 1561, fecha importante para el desarrollo de la ciudad de Madrid.Eneste año el rey Felipe II dispone su residencia habitual y la sede de la Cote en nuestra ciudad. Desde el centro de la Península, el rey podría organizar los diferentes territorios hispánicos. Las razo-nes de por qué Felipe II eligiera Madrid como capital del reino en detrimento de otras ciudades más desarrolladas como Lisboa o Sevilla, pueden ser las siguientes:
Siglos XIX—XX: Edad de Plata del Madrid literario.
Durante el ocaso del Neoclasicismo y principios del siglo XIX, la ciudad de Madrid vive dos su-cesos que hay que reseñar en esta inroducción: por un lado, El Motín de Esquilache (1776), que trajo la prohibición de la vestimenta habitual de los madrileños: capa larga y sombrero, y la consecuente reacción airada de los ciudadanos. Por otro lado, el 2 de mayo de 1808, elpue-blo de Madrid, enojado por la invasión de las tropas napoleónicas, salió a la calle para plantar cara al invasor galo y reinvindicar su libertad. Armados con palos y piedras, un ejército popu-lar logró vencer a las tropas de Napoleón. Pero, desde mediados del siglo XIX hast principios del XX , Madrid se ha caracterizado por ser escenario de novelas, poemas y obras de teatro, así como cuna o residencia de varias generaciones de literatos y artistas de relieve. Las grandes figuras del movimiento romántico español desarrollaron su exitosa, pero efímera carrera, en el centro de Madrid. Béquer, Larra, Espronceda, Duque de Rivas, todos ellos fre-cuentaban los cenáculos literarios de la ciudad y en ésta lograron inspirar sus versos. Igualmen-te, el realismo de Benito Pérez Galdós tuvo como enfoque particular la ciudad de Madrid. En ella se desarrollan algunos de sus Episodios Nacionales y dos de sus más reconocidas novelas. Fortunata y Jacinta, ambientada en las calles que circundan la Plaza Mayor; y Misericordia, que relata la vida de los pedigüeños madrileños en la parroquia de San Sebastian ( Calle Atocha).
El Madrid del siglo XX se vio zarandeando por los sucesos de tres largos años de Guerra Civil.
Madrid ha visto también la letra escrita entre sus calles a lo largo de la centuria pasada: Pío Ba-roja estudió en el Intituto de Secundaria de San Isidro, y por el centro de Madrid tienen lugar los sucesos de la novela El árbol de la ciencia; Valle Inclán nos narra de la mano de Don Latino de Híspalis, en Luces de Bohemia, la vida nocturna, decadente y esperpéntica del Madrid de las primeras décadas del siglo XX ; los poetas y artistas de Generación del 27 y de las Vanguardias empezaron sus creaciones en la Residencia de Estudiantes ( Calles Serrano ), coincidiendo allí varios pesos pesados de nuestras artes: Lorca, Buñuel y Dalí; otros poetas y novelistas como Ru-bén Darío, Benedetti, Neruda y Vargas Llosa, entre otros muchos, han vivido en la capital y aquí han podido invocar a su musa.
Madrid, en la actualidad.
Desde la década de los 80 (Época de la Movida), eclosión cultural y social de la ciudad. Madrid se ha caracterizado por su carácter abierto, cambiante, mezcla de lo castizo y de la vanguardia, y por la unión de lo clásico y postmoderno. Son estas quizás las cualidades más señeras de una ciudad con horizontes culturales diversos.
Madrid en la Prehistoria y en la Antigüedad.
Pocos datos se conocen de lo que vendría a ser Madrid, permítasenos el anacronismo, an-tes de la Edad Media. Durante la Prehistoria, según apuntan numerosos yacimientos, el te-rritorio de nuetra ciudad fue habitado por pe-queños núcleos de población en las terrazas del río Manzanares. En la Antigüedad, fueron los carpetanos y algunas tribus celtas los que en el centro de la Península Iberica se dispu-sieron antes de la entrada de los romanos. Con ellos, Madrid no tendría desarrollo urba-nístico importante, pues, salvo Complutum—Alcalá de Henares hoy en día-, la Comunidad de Madrid fue un territorio de paso en el cen-tro de Hispania, como demuestran algunas calzadas romanas que se conservan en la sie-rra madrileña.
El nacimiento de Madrid: Matrice y Magerit.
Al inicio del Medievo, el territorio de Madrid formaba parte , salvo el obispado de Alcalá, de la capital del reido visigodo, Toledo. De esta época debemos el primer nombre de Madrid: Matrice, etimología difusa que, según los expertos, hace referencia a un arroya de agua. No sería hasta la conquista de la Península por parte de los musulmanes hasta que la ciudad no surgirá como localización poblacional. Sera, Muhammad I, allá por la segunda mitad del si-glo IX, quien la convirtió en fortaleza defensiva de Toledo, debido a su privilegiada situación (en el centro de la Península y cerca de la capital manchega).De nuevo la etimología debe acudir en nuestra ayuda, pues el siguiente nombre de la ciudad, del que deriva el actual, fue Magerit, en árabe, la cuidad madre de las aguas, por los beneficios de los acuíferos que allí había. En la Reconquista cristiana (año 1083), Alfonso VI la incorporará a los reinos castellanos, y poco a poco la ciudad irá tomando unas características propias de cos-mopolitismo, al darse allí la convivencia de musulmanes, cristianos y judíos. Magerit irá pronto transformándose en el latino Matrit por influencia de las lenguas romances que cada vez ten-drían más peso en la zona. Entrada la Edad Media, en el año de 1309, Madrid ve celebrarse sus primeras Cortes, acogiendo al rey Fernando VI. Un siglo antes, 1202, la ciudad obtuvo su fuero de municipalidad, iniciando así su andadura para ser la capital del reino hispánico.
Madrid, capital de las Hispanias.
La urbe irá poco a poco despertando los gustos de los diferentes monarcas. Los Reyes Católicos entraron solemnemente en Madrid en 1447 tras haber derrotado a las tropas portuguesas. Igualmente Carlos V, ya en la primera mitad del siglo XVI, acudío a la ciudad de Madrid en es-tancias cortas, atraído principalmente por los bosques donde practicar la caza que tanto le apa-sionaba. La ciudad en estos primeros años de la Edad Moderna sería un núcleo urbanístico re-ducido, de apenas 3400 habitantes, con un alcázar y algunas iglesias menores. La actual zona de La Latina, Las Vistillas, Puerta Cerrada …, son vestigios de ese Madrid que empieza a despuntar.
Felipe II y los Austrias.
Por fin llegamos al año 1561, fecha importante para el desarrollo de la ciudad de Madrid.Eneste año el rey Felipe II dispone su residencia habitual y la sede de la Cote en nuestra ciudad. Desde el centro de la Península, el rey podría organizar los diferentes territorios hispánicos. Las razo-nes de por qué Felipe II eligiera Madrid como capital del reino en detrimento de otras ciudades más desarrolladas como Lisboa o Sevilla, pueden ser las siguientes:
- Por su ubicación natural, en una zona alta de la Meseta, a modo de defensa natural; por sus condiciones climatológicas, gozando de sus salutíferas aguas, los aires de la sierra al norte y de la bonanza de las riberas al sur del Tajo; por una cuestión de vigilancia y supervisión de la gran obra filipina: El Escorial (1584); por la falta de poderes fácticos que pudieran dar sombra o influir sobre el rey; y por la relativa cercanía con respecto a todos los puntos de la Península Ibérica.
- Tras mover la Corte a Valladolid entre 1601– 1606, Felipe III establece como definitiva la capi-talidad de los reinos hispánicos en Madrid . La ciudad, por tanto, irá creciendo paulatinamen-te a lo largo del siglo XVII. Acudirán a ell nobles, burgueses, cortesanos y clases populares que se dispondrán alrededor del alcázar real, por los barrios de Lavapiés, Plaza de la Villa, Antón Martín, Plaza Mayor, … El Siglo de Oro de nuestras letras y artes tiene en Madrid una especial trascendencia. Por las calles del actual centro histórico ( Huertas, Prado, Santa María, Fúcar…) vivieron escritores, pintores y artistas de la talla de Velázquez, Lope de Vega, Calderon de la Barca, Francisco de Quevedo, Miguel de Cervantes o Luis de Góngora, entre otros, atráidos por el empuje cultural de la Corte y de la nobleza, quien serviría de mecenas para sus obras. Ya en esta época, esta parte de Madrid recibe el nombre de Madrid de las Letras.
El Siglo de la Ilustración: Carlos III, el mejor alcalde.
Con Carlos III ( 1759 - 1788 ) se abre el verdadero despertar de la ciudad de Madrid como ur-be europea. Inspirándose en las ideas de la Ilustración, el rey Borbón saneó, iluminó, limpió, lustró y modernizó la ciudad en todos sus puntos. Se reformó el alcantarillado, se inició el alumbrado público y se construyeron puertas y jardines de inspiración clásica ( Jardín Botáni-co, Puerta de Alcalá, Colegio de San Carlos, Paseo del Prado, Fuente de Cibeles, Fuente de Neptuno …). Asimismo, tras el incendio del alcázar, los arquitectos italianos Sabatini y Sachetti proyectaron uno de los palacios reales más lujosos del mundo y el más grande de Europa oc-cidental: el Palacio Real de Madrid, de estilo neoclásico. Carlos III fue el primer monarca que fijó su residencia allí, lo que aún perdura hoy en día, pues aunque los actuales reyes no vivan aquí, sí tienen su residencia oficial en el Palacio Real.
Con Carlos III ( 1759 - 1788 ) se abre el verdadero despertar de la ciudad de Madrid como ur-be europea. Inspirándose en las ideas de la Ilustración, el rey Borbón saneó, iluminó, limpió, lustró y modernizó la ciudad en todos sus puntos. Se reformó el alcantarillado, se inició el alumbrado público y se construyeron puertas y jardines de inspiración clásica ( Jardín Botáni-co, Puerta de Alcalá, Colegio de San Carlos, Paseo del Prado, Fuente de Cibeles, Fuente de Neptuno …). Asimismo, tras el incendio del alcázar, los arquitectos italianos Sabatini y Sachetti proyectaron uno de los palacios reales más lujosos del mundo y el más grande de Europa oc-cidental: el Palacio Real de Madrid, de estilo neoclásico. Carlos III fue el primer monarca que fijó su residencia allí, lo que aún perdura hoy en día, pues aunque los actuales reyes no vivan aquí, sí tienen su residencia oficial en el Palacio Real.
Siglos XIX—XX: Edad de Plata del Madrid literario.
Durante el ocaso del Neoclasicismo y principios del siglo XIX, la ciudad de Madrid vive dos su-cesos que hay que reseñar en esta inroducción: por un lado, El Motín de Esquilache (1776), que trajo la prohibición de la vestimenta habitual de los madrileños: capa larga y sombrero, y la consecuente reacción airada de los ciudadanos. Por otro lado, el 2 de mayo de 1808, elpue-blo de Madrid, enojado por la invasión de las tropas napoleónicas, salió a la calle para plantar cara al invasor galo y reinvindicar su libertad. Armados con palos y piedras, un ejército popu-lar logró vencer a las tropas de Napoleón. Pero, desde mediados del siglo XIX hast principios del XX , Madrid se ha caracterizado por ser escenario de novelas, poemas y obras de teatro, así como cuna o residencia de varias generaciones de literatos y artistas de relieve. Las grandes figuras del movimiento romántico español desarrollaron su exitosa, pero efímera carrera, en el centro de Madrid. Béquer, Larra, Espronceda, Duque de Rivas, todos ellos fre-cuentaban los cenáculos literarios de la ciudad y en ésta lograron inspirar sus versos. Igualmen-te, el realismo de Benito Pérez Galdós tuvo como enfoque particular la ciudad de Madrid. En ella se desarrollan algunos de sus Episodios Nacionales y dos de sus más reconocidas novelas. Fortunata y Jacinta, ambientada en las calles que circundan la Plaza Mayor; y Misericordia, que relata la vida de los pedigüeños madrileños en la parroquia de San Sebastian ( Calle Atocha).
El Madrid del siglo XX se vio zarandeando por los sucesos de tres largos años de Guerra Civil.
Madrid ha visto también la letra escrita entre sus calles a lo largo de la centuria pasada: Pío Ba-roja estudió en el Intituto de Secundaria de San Isidro, y por el centro de Madrid tienen lugar los sucesos de la novela El árbol de la ciencia; Valle Inclán nos narra de la mano de Don Latino de Híspalis, en Luces de Bohemia, la vida nocturna, decadente y esperpéntica del Madrid de las primeras décadas del siglo XX ; los poetas y artistas de Generación del 27 y de las Vanguardias empezaron sus creaciones en la Residencia de Estudiantes ( Calles Serrano ), coincidiendo allí varios pesos pesados de nuestras artes: Lorca, Buñuel y Dalí; otros poetas y novelistas como Ru-bén Darío, Benedetti, Neruda y Vargas Llosa, entre otros muchos, han vivido en la capital y aquí han podido invocar a su musa.
Madrid, en la actualidad.
Desde la década de los 80 (Época de la Movida), eclosión cultural y social de la ciudad. Madrid se ha caracterizado por su carácter abierto, cambiante, mezcla de lo castizo y de la vanguardia, y por la unión de lo clásico y postmoderno. Son estas quizás las cualidades más señeras de una ciudad con horizontes culturales diversos.
lunes, 5 de octubre de 2015
Mi Madriz
Madrid :La ciudad del Manzanares, del chotís, del chocolate con churros, de la caña y la tapa; la gran urbe cosmopolita y a la vez tradicional, la caótica y a la vez puntera metrópoli europea; la villa y corte, chula multiforme, castiza y cañi, guarda y custodia innumerables secretos y curiosidades de sus casi mil años de historia. Desde los restos del Paleolitico en las cuencas del Manzanares hasta la construcción de los rascacielos de Plaza de Castilla en la actualidad, Madrid se ha ido construyendo a sï misma a través de diferentes momentos históricos que es preciso conocer para entender mejor su idiosincrasia, Por tanto, querido visitante, considera estos pocos datos antes de adentrarte por entre las calles y avenidas de nuestra ciudad.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)